¿Puedo cortar mi cabello después de un tratamiento de keratina?

 

Si te has hecho un tratamiento de keratina en casa o en el salón de belleza, imagino que estabas buscando disminuir el frizz o disciplinar tu cabello para que luzca aún más bonito.

 

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Por esta misma razón, te diría que cortar el cabello es casi obligatorio después de un tratamiento químico como la keratina. Porque, aunque la keratina sea libre de formol, aun así puede resecar un poco las puntas.

 

¿Acaso la keratina que han empleado en tu cabello sí tenía formol en su composición?

Entonces, con más razón podrías y deberías cortar tu cabello. Así que, adelante, ¡hazte un corte bonito!

 

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Ahora que sabes que puedes cortar tu cabello y que eso no estropeará tu tratamiento de keratina, ¿has pensado ya qué tipo de corte podrías hacerte?

¿Qué corte de cabello elegir si eres de las que viven a mil por hora?

 

Si aún no logras decidirte, te ayudaré con eso. Pero antes permíteme que te dé algunas ideas de lo que podrías pedirle a tu estilista para realzar la belleza de tu cabello luego del tratamiento de keratina.

 Verás, a la hora de elegir un corte de pelo, lo más importante es conocer qué tipo de cabello tienes y cuánto tiempo estás dispuesta a dedicarle.  

 

El corte y el resultado final no solo van a depender del tipo de cabello que tengas, sino del tiempo que dediques a peinar o modelar ese corte.

Por eso, te recomiendo que vayas siempre a lo seguro: de nada te serviría obtener un gran corte, si luego no puedes o quieres peinarlo.

 

Debes tener en cuenta tu rutina antes de elegir un nuevo corte

¿Has encontrado en alguna revista un corte que sencillamente amas?

¿Te ha fascinado cómo luce alguna celebridad con su nuevo look?

 

Espera un momento antes de salir corriendo al salón de belleza. Si algo de lo anterior está ocurriendo en tu cabecita, te recomiendo que vuelvas a mirar esas fotos y te hagas dos preguntas:

1) ¿Esa mujer tiene el mismo tipo de cabello que tengo yo?

2) ¿Estoy dispuesta a peinarme de esa manera?

 

 Estas dos simples preguntas te servirán para bajar a la realidad y buscar alternativas más adecuadas a tu tipo de pelo. 

¿Por qué insisto con esto?

 

Suele ocurrir que las clientas llegan al salón de belleza con fotos y cortes que nada tienen que ver con su tipo de cabello o con su estilo de vida.

Por eso, recuerda este sabio consejo: si eres de las que sale con el cabello mojado y no tienes tiempo o ganas de secarlo y peinarlo, mejor opta por un simple corte de puntas.

No es necesario que te arriesgues con un corte que luego necesitará un trabajo extra si no estarás dispuesta hacerlo.

¿He sido clara contigo, mi bella soñadora?

 

¡Ahora sí! Opciones de corte según tu tipo de cabello

 

A ti, te recomiendo que cortes tu cabello en capas cortas para favorecer la forma del rulo.

Eso puede resultar muy adecuado, sobre todo después del tratamiento de keratina, porque seguramente tu cabello estará mucho más liviano y dócil. Más aún, con ese corte podrás manejarlo a la perfección.

 

En ese caso, las capas podrían quedarte bien, siempre y cuando dejes la primera un poco más larga para que aplaste a las demás. ¿Te preguntas por qué te doy esta recomendación?

Verás, si tu cabello es demasiado fino y a eso le añades un tratamiento de keratina, tu cabello podría quedar demasiado liviano. En cambio, dejando una capa un poco más larga, evitarás que se infle el resto de la cabellera. Porque… nadie quiere un cabello esponjado, ¿verdad?

 

Extra tip: si tienes el cabello rizado y no deseas cortarlo en capas, puedes optar por media melena, estilo bob largo y ligeramente desmechado en la parte de atrás. Aprovecha el tratamiento de keratina para sacarle ventaja a tus hermosos rizos.

 

Entonces, puedes hacerte un corte más osado, como un micro bob desmechado o un mullet. ¡Pero ten en cuenta que deberás darle un toque de secador para estilizarlo y aportar movimiento a las puntas!

Ocurre que, después del tratamiento de keratina, tu pelo podría quedar demasiado liso y deberás ayudarte para conseguir el tan amado y codiciado volumen.

 

 Extra tip: si bien el cabello lacio está siempre prolijo y este es un gran beneficio, es posible que algunas veces resulte aburrido. 

Es decir, el lacio es muy bello, pero puede perder su gracia fácilmente. Pero tranquila, utiliza la plancha o la buclera y rápidamente conseguirás un poco de glamour para tus puntas.

 

¡Hey, tienes suerte! Si tu cabello es el típico “ni fu ni fa”, cuentas con más alternativas para tu nuevo corte.

 Además, el tratamiento con keratina te habrá ayudado a reducir el frizz y podrás lucir tus ondas mucho más controladas. 

 

Pues bien, los desemechados quedan perfectos para este tipo de cabello ondulado, no importa si es grueso o más fino.

Casi todos los cortes se adaptan a este tipo de pelo: los bob ligeramente asimétricos y desemechados, los mullet o los flequillos largos levemente de lado quedan siempre fantásticos. Los shaggy también son ideales, siempre y cuando tengas bastante cabello.

 

Como verás, las combinaciones son infinitas. Además, las ondas son tendencia y están a la moda, ¡disfrútalas!

 

La clave de una buena elección: conoce la forma de tu cabello

Sin embargo, recuerda lo que te dice esta peluquera amiga: pocas son las afortunadas que pueden salir por la vida con el cabello mojado después de lavarse.

La mayoría necesitamos la ayuda de alguna herramienta de calor o los amados productos de styling.

 

Pero lo más importante es que conozcas la forma de tu cabello y que analices bien tus opciones a la hora de elegir un corte de cabello.

 Ahora que el tratamiento de keratina se ha convertido en tu aliado, podrás elegir entre muchas más opciones. 

 

Como te he dicho antes, si no te animas a un gran cambio, tan solo recorta las puntas, conservando el mismo estilo que llevas actualmente. Ya sabes, si no estás tan segura, no es momento de cambiar.

 

Recurre a un estilista profesional y permite que te asesore antes del tratamiento con keratina y luego, a elegir tu próximo look.

Si un corte te obliga a cambiar toda tu rutina de peinado, sin dudas, no es el corte adecuado para ti. ¡Piénsalo bien!