¿Has pensado alguna vez en hacerte una permanente en las puntas de tu cabello
? Yo sí, y todo empezó con una epidemia.
Pero déjame contarte lo que me pasó desde el principio.
¿Alguna vez te ha pasado que te quedas mirándote en el espejo como diciendo “me falta algo” y no sabes muy bien qué es?
A mí me pasaba mucho, hasta hace tres meses.
Todo empezó con una epidemia en el grupo de mis mejores amigas, las cinco fantásticas.
Lentamente, como una bacteria que lo va invadiendo todo, una a una mis amigas fueron cayendo.
No te asustes. No era una epidemia de ébola ni de fiebre amarilla. Era una epidemia de cambio de look capilar.
- Alejandra y Liliana decidieron cambiar el color de sus cabellos. Pero no se conformaron con aclarar uno o dos tonos sus cabellos castaños.
- Se decidieron por un cambio total y rajante. Alejandra pasó a tener el cabello lila y Liliana el cabello celeste.
- Después fue el turno de Mariana. Ella tenía una melena por los hombros y resolvió que quería lucir una cabellera larga. ¿Solución? Se agregó unas extensiones que prácticamente le llegaban por la cintura.
- Lo de Laura fue más clásico, un tratamiento de keratina para lucir un lacio perfecto.
Y ahí es donde yo empecé a manifestar los primeros síntomas de la epidemia, frente al espejo.
Me miraba, me miraba y trataba de imaginarme con diferentes looks. ¡A mí también me había picado el bichito del cambio de look!
Pero no me animaba a cambios dramáticos de color. Las extensiones me parecían algo un poco artificial, con perdón de mi amiga Mariana.
Y mi cabello ya era lacio. Lacio, hasta llegar a ser casi hasta lánguido.
Un día, mientras iba en el tren rumbo al trabajo, observé el cabello de otra pasajera.
¡Y tuve la respuesta a mis inquietudes!
Su cabello era lacio en las raíces hasta los medios, donde se empezaban a formar unos divertidos bucles, que le daban movimiento, volumen y vida.
¡Eso era lo que yo quería! Ese día se me hizo eterno en el trabajo, pero cuando llegué a mi casa me abalancé sobre la computadora y comencé a investigar.
Podía usar un rizador para crear esos rizos. Pero era demasiado trabajoso, y además, no era algo permanente.
¿Dije permanente? ¡Eso era! ¿Una permanente? Pero me venían a la cabeza esas permanentes tipo rulos sacacorchos, que no era lo que yo buscaba.
Pero a medida que me adentraba en la investigación, descubrí que era posible hacer un ondulado permanente solo en las puntas.
¡Ya tenía la solución!
Pero haría una permanente solo en las puntas. Pero, la permanente es un proceso bastante complicado. Debes saber elegir el tamaño correcto de bigudíes y debes aplicar unos químicos bastante potentes.
Así que tomé una cita en un salón, que me recomendó una de mis primas.
¿Quieres saber cómo conseguí una permanente en las puntas? Entonces no te muevas de allí.
Porque te contaré:
- En qué tipo de cabellos queda mejor una permanente solo en las puntas
- Cómo se aplica la permanente en las puntas paso a paso
Y además, ¿te imaginas como reaccionaron mis amigas a mi cambio de look?
Sigue leyendo y lo descubrirás.
Tabla de Contenidos
Para qué tipo de cabello es mejor la permanente en las puntas
El día de la cita, busqué algunas fotos en las revistas que tenía en casa, en las que se podía ver el tipo de permanente que quería lograr.
Y ahí me fui, con las fotos y el corazón más acelerado que el de una novia el día de su boda.
La estilista, una especialista en permanente, ya me estaba esperando. Me pidió las fotos y después de observarlas muy bien, empezó a examinar mi cabello.
Y por fin, me dio la buena noticia: mi cabello era perfecto para realizar una permanente.¿Quieres saber lo que me explicó?
- Hacer la permanente solo en las puntas permite que tanto los medios como los extremos, obtengan más volumen y mucho más movimiento.
- Es recomendable en cabellos cortos o en cabelleras medianas, esas que pasan apenas diez centímetros de los hombros.
- En cabellos largos, ella no la recomienda, porque el peso del cabello, hace que los rizos se desarmen más rápidamente. Por lo que la permanente dura mucho menos.
- Tampoco es muy recomendable en cabellos muy gruesos, por el mismo motivo.
¿Tu cabello es fino y por eso quieres lograr mayor volumen en las puntas?
Podrás hacerte la permanente en las puntas perfectamente. Solo existe una condición: que tu cabello esté muy saludable.
Porque no debemos olvidar que la permanente cambia la estructura del patrón de tu cabello gracias a los químicos que se emplean.
Y aunque la estilista sea muy buena y los productos sean de calidad, siempre tu cabello se debilitará un poco, quedará más frágil.
Por eso, si te has hecho el color o cualquier otro tratamiento químico en el cabello, como un alisado por ejemplo, no es conveniente que te hagas el moldeado en las puntas.
Cómo se aplica la permanente en las puntas paso a paso
- Lo primero que hizo mi estilista fue lavarme el cabello con un shampoo especial, para asegurarse de que no hubiera resto de otros productos capilares en él.
- Una vez que lo desenredó y peinó, dividió mi cabello en varias secciones, y comenzó a colocar los bigudíes, que a mi entender , eran de tamaño mediano.
El tamaño del bigudí es muy importante, porque yo no quería un rulo apretado en las puntas, sino una onda suave.
Por supuesto, que desde las raíces hasta la mitad de mi cabellera no colocó ningún rulero, solo a partir de la mitad y hacia las puntas.
Porque en este tipo de permanentes solo se debe enrollar la zona de los medios y puntas que se desea rizar.
Lo que observé es que pasó cada una de mis mechas por el interior del bigudí, y lo colocó perpendicular al cuero cabelludo.
Me explicó que hacía esto para facilitar la sujeción del rulero, y no dejar la marca de la goma sobre el cabello.
- Los pasos que siguen son los mismos que en cualquier tipo de permanente, se coloca la solución permanente, que cambia la estructura interna del cabello, se enjuaga y luego, se aplica el neutralizante, que es el fijador de la forma del rizo.
Después de prácticamente tres horas, la estilista estaba lista para que yo descubriera mi imagen por fin en el espejo.
¿Recuerdas que te comenté que siempre me miraba al espejo y me parecía que algo me faltaba?
Cuando me miré por primera vez al espejo en la peluquería, descubrí que era ese “algo”que me faltaba: VIDA.
A mi cabello le faltaba vida.
Pero eso ya era cosa del pasado. Porque ahora en mis extremos había vida, movimiento, volumen, rebote.
Y mis facciones habían tomado una nueva dimensión.
Era como que mis ojos verdes resaltarán más y los ángulos de mi cara, que antes eran bastante prominentes, se hubieran hecho más pequeños.
Conclusiones y como cuidar tu permanente
Antes de irme, la estilista me dio una serie de recomendaciones: nada de lavar mi cabello las primeras cuarenta y ocho horas, usar shampoos sin sulfatos y adiós al secador de pelo.
¿Quieres saber cómo reaccionaron mis amigas frente a mi nuevo look?
¡No pararon de sacarme fotos para compartirla en las redes sociales!
Y no podían creer cómo la permanente me había beneficiado.
Para celebrarlo nos fuimos de fiesta, las cinco fantásticas, que habían derrotado a la epidemia de cambio de look, con resultados más que satisfactorios.
Ahora ya sabes en qué casos queda bien hacer rizos u ondas solo en puntas o de medios a puntas.
¿Todavía tienes dudas sobre la permanente?